En busca de una relación saludable y duradera
Más que una tendencia, estamos ante la necesidad imperiosa de equilibrar el desarrollo de las organizaciones con el medio ambiente en el cual se desarrollan y del cual se nutren. Es posible crecer sin deteriorar los principales recursos que fundamentan la existencia de las empresas, para ello la conciencia asociada a aspectos económicos son determinantes. Si pretendemos un futuro promisorio las empresas deben desarrollar herramientas verdaderas, comprobables y comprometidas con una filosofía de crecimiento sustentable.
Por: Ramiro Castillo Bond. Soporte Empresario S.A.
El contexto ambiental en el cual nos encontramos
Alarmante es la palabra que define el contexto en el cual estamos insertos a nivel ambiental, alcanza con tomar las predicciones científicas desarrollas por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) en septiembre de 2013, en las mismas se confirma al igual que en 2007 que la tierra está atravesando una instancia de calentamiento acelerado, con pronósticos devastadores y catastróficos en menos de lo que dura una vida promedio para el ser humano, 4,8C es lo que podría elevarse la temperatura para finales del siglo XXI.
Las consecuencias de este fenómeno, del cual el hombre es 95% responsable no son predicciones, son realidades que con solo observar un noticiero podremos corroborar. De no frenar este calentamiento con una reducción radical de las emisiones de dióxido de carbono, el ambiente natural del planeta continuara alterándose y con ello la calidad y forma de vida de los 7.000 millones de personas que lo habitan. Podemos observar los síntomas de calentamiento en:
- La temperatura media que ha experimentado un crecimiento de 0,85 grados desde inicios del siglo XX a hoy.
- La continuidad en el deshielo de glaciares de montaña y glaciares de la Antártida.
- El Aumento de 0,19 metros del nivel el mar en estos últimos 100 años.
- La acidificación de los mares.
Las consecuencias pueden observarse en la:
- Degradación de ecosistemas, afectando a la disponibilidad de alimentos, forrajes, materiales de construcción y combustibles.
- Escases de agua, debido a sequías, evaporación y cambio en las precipitaciones.
- Incremento de enfermedades, incluso muertes, asociadas a la aparición de olas de calor combinadas con humedad.
- Lesiones por eventos climáticos extremos como inundaciones, tormentas y deslizamiento de laderas.
- Migraciones en masa como resultado de la degradación de recursos claves y amenazas a los medios de subsistencia.
- La amenaza de extinción de un 30% de la biodiversidad aportada por especies animales y vegetales que tienen su lugar en este planeta.
Para el caso de CUYO, las variaciones climáticas que se asocian al calentamiento ponen en condición de vulnerabilidad a los principales oasis de la región, pues su caudal e intensidad están asociados a la nieve y cuerpos de hielo cordilleranos. Los principales resultados observados por el IANIGLIA en sus proyecciones establecen para 2021-2030 aumentos de la temperatura media en 1.25C, disminución de 100 mm en la caída de nieve sobre la cordillera y aumento de precipitaciones en el llano y pedemonte.